MITICO MONTON DE MIERDA

Vivo en un agujero donde nunca llueve pero llueve demasiado. Se inunda y me mojo y no puedo pensar mas que en el fuego.
En aquellas noches de incendio tan lejos, lejos, lejos, lejos, lejoer, lejorejr,lejpe jrjaegvklbnm... de aquí.
Salgo de mi agujero. Hay un puticlub al lado. Recuerdo, cuando era niña y pura inocencia, al volver a casa despues de un duro día de incomprension en el colegio, que las putas nos enseñaban las tetas desde el balcon y nos saludaban con una sonrisa.
He descrito solo el primer quilometro cuadrado que hay alrededor de mi agujero.
A la derecha hay un geriatrico con unas bonitas vistas al mar... y al unico cementerio del pueblo.
Vivo cerca del mar. Y antes me gustaba cuando no me hacia sentir tanta soledad.
Odio que la arena se meta entre los dedos de mis pies, es muy dificil de limpiar.
Pumpumpumpumpum cada fina gota se siente como una pequeña explosion en el patio de mi casa, que es particular y cuando llueve por desgracia se moja, como los demas.
H I J K


Cerca de mi agujero no hay nada interesante, borrachos y barras de bar.
El camping mas caro de la historia con una piscina donde se mean los niños.
Hay una playa y muchos drogadictos.
Hay arte en las cagadas de paloma que pintan las aceras.
Es todo muy bonito.

Si cojes un tramvia, con suerte (SUERTE!) algun día consigas llegar al nucleo de la capital.
Donde no mejora mucho la situacion.
¿Que nos podemos encontrar, señor director?
Vidas insulsas, por supuesto y altas dosis de alcohol!
¿Que mas quiero yo? ¿Que mas quiero yo?
Quiero ver el Guernika de una santa vez!
Quiero volver a Atocha para pintar tu piel!
Perderme en la Gran Via como dice la cancion!
No saber nada del reloj que hay en la puerta del Sol
Pero no quiero mi agujero.

Quiero estar lejos del comienzo y fuera de control!

Olvidarme del dolor y sentir por fin el verdadero amor que me evoca la gente que por fin! acepta la mañana Alicantina.

La de ojos verdes que lucha cada dia por no se una mas, si no por ser la mejor.

El mundo real tambien puede ser un lienzo.

Un pájaro que sobrevuela el campo. No hay mas que marrón mezclado, que seda de agua. Edificios, mastodontes que vomitan personas, regurgitan ideas y mastican sentimientos. Peligro, campo abierto, ignorancia del que no sabe pensar por si mismo.
La tierra es un mar de mierda, tiene bonitas olas, formas surrealistas que no creemos que de verdad existan.
Las turbulencias ponen a uno la piel de gallina cuando es nuestro pecho el que mas vibra. Yo quiero ver las montañas desde arriba para saber lo que me espera cuando me entierren a 2 metros bajo tierra.
Puntas de azúcar helada, hoy he nadado en un mar de nubes durante horas. El eco siempre está ahí pero no escuchamos lo que dice. Eran acolchadas, gris, azules, blancas.
Dormir para ignorar lo que tememos, sentir esa presión a punto de hacerme estallar las sienes por los oídos. Odio a los sin cara con escarcha plateada, sin boca y sin mirada, con las manos frías como el acero, con el alma de un cruel carcelero.
Volver a mirar los campos de fresas que algún día ellos destruyeron. No quiero ser tu héroe, pero si tu eres el mio seria motivador para seguir viviendo, enseñame lo que hay ahí arriba, dime que el mar también puede ser de tela rizada, que puede ser de algo que de menos miedo que el agua.

Un pájaro sobrevuela la ciudad. No hay mas que gris apilado y destellos naranjas. Miles de revoluciones por minuto dentro de las cuencas de los ojos. Claxon, coca cola, cocaína, bombas, tiros, dolor, amor, odio.
¿No sabes lo que es todo eso?
¡El mundo puede ser un lienzo también! Pensó un día el inventor que demuele vidas. Cuanta ignorancia de mirada a 1'80 de la acera de cemento.
Esperamos que alguien nos salve de nosotros mismos y así dejamos que pase el tiempo.
¿Llegara algún día un rey que derrote al peor león de la manada?
No, no va a llegar nunca.
Pero sigue sentado en ese sofá, evadiendo tu inconsciencia con un poco mas de mierda.
Quizás cuando llegue el fin, nadie sienta nada mas que ansias de reírse del dolor.



P.D: Creo que me he hecho adicta a los aviones y a Madrid.

After Show (En la cueva húmeda) (Más, más, más)

Vuelven a indagar en la cueva de donde alguna vez salieron. Han estado ahí muchas veces, aunque en circunstancias diferentes, siempre con un mismo fin.
Porque siempre hay un destino, aunque no lo sepan ver, el mundo se quedo ciego de tanto egoísmo, eso no es nada nuevo.
Solo hay presión, la presión del amor en cada centímetro de musculo bajo su piel.
Gritos de silencio que solo expiran aire y vida, sobre todo mucha vida. La que se puede engendrar con el solo contacto visual, con cada palabra, con el vistazo hacia lo desconocido. A veces lo desconocido no da miedo.
Ya no quedan resquicios de almas pasadas, solo una capa nueva y bien tapada con el material más fuerte y flexible del mundo. La verdad del todo.
Las heridas que no cicatrizaron bien siguen ahí, pero cada día se cosen con nuevos hilos de oro y de plata.
Las heridas que lo hicieron, desaparecieron dentro de un agujero que no existe y que nunca más volverá existir.
Solo queda sentirse bien y ser más libre que ayer.
Los pobres no volverán a ser más pobres que los ricos. Tienen la fuerza. ¡LA FUERZA! La voluntad y la curiosidad del saber, del conocimiento, de la palabra de cada rincón que nunca han limpiado y que un día decidieron pulir y pintar de transparente.
No volverán a ser más débiles que ellos, no mientras huyan cada día un paso más de la ignorancia de dejarse llevar por el conformismo.
Ella nunca fue conformista, solo se quedo ciega durante unos leves segundos de su corta y desesperanzada vida.
Él es más fuerte que todos vosotros.
Y los ricos son ignorantes, creyentes de una mentira tan grande como la que está construida bajo los cimientos de este mundo. Creen que sus manos controlan un gobierno de títeres absurdos, de títeres de tela que no hacen más que consumirse con el fuego de la ira. La ira de las palabras que gritan los sabedores desde las aceras bajo sus casas.
Las pancartas están tatuadas en la piel, la rabia y el amor se dan la mano en cada par de ojos que todo lo observan.
Somos pertenecientes a la especie más letal que se haya visto nunca.
Somos los defensores de la belleza de lo inhumano.
Los defensores de lo grotesco,
Los defensores del color.
Los defensores de sentimientos.